lunes, 24 de febrero de 2014

Manual para periodistas en tiempos de conflicto


Protestas y Disturbios

AFP
AFP
Los periodistas que cubren protestas y otros disturbios civiles violentos enfrentan riesgos legales y físicos por todos los sectores, a menudo al mismo tiempo. Alrededor de 100 periodistas murieron cuando cubrían protestas callejeras y otros disturbios civiles entre 1992 y 2011, según revela la investigación del CPJ. En 2011, casi un 40 por ciento de las bajas de periodistas por su labor informativa se produjo durante situaciones de este tipo, la proporción más elevada que jamás registrada por el CPJ.

Un buen estado físico es importante al cubrir situaciones que podrían repentinamente volverse violentas; los periodistas cuya movilidad está limitada deberán ponderar los riesgos anticipadamente. Estar atentos a la ubicación es también esencial en todo momento, y esto, en general, significa encontrar un punto de observación que permita tener una visión tanto de los manifestantes como de la policía antidisturbios o de otras autoridades, sin terminar entre ambas partes. Tome conciencia de cómo estos acontecimientos se han desarrollado en los mismos lugares en el pasado. Trace rutas de salida con antelación y considere trabajar en equipo cuando cubre situaciones potencialmente violentas. Los equipos de fotógrafos y redactores, operadores de sonido y camarógrafos y equipos de producción y corresponsables le permiten a los periodistas cuidarse entre sí en tales situaciones.
En muchos países, las organizaciones de prensa contratan equipos de seguridad para que acompañen a los periodistas. La avalancha de ataques contra periodistas durante la revolución en Egipto en 2011 y sus secuelas subrayaron las violentas situaciones que los periodistas pueden enfrentar durante momentos de descontento popular. Los periodistas también deben conocer cuáles son las leyes y prácticas en caso de que las fuerzas de seguridad o los manifestantes exijan revisar o confiscar los cartuchos de video u otro material grabado.
La vestimenta debe elegirse con atención, incluyendo el decidir si conviene llamar la atención o mezclarse con la gente. La ropa debe ser suelta y elaborada en tela natural, dado que los materiales sintéticos pueden prenderse fuego y arder con más rapidez, observa la Federación Internacional de Periodistas de Bruselas. Se aconseja asimismo usar buen calzado con apoyo apropiado y flexible, y suelas anti-deslizantes.
Trate de mantenerse alejado de lo que pueda resultar perjudicial. Uno podría pensar en los periodistas como árbitros en el campo de juego. El árbitro debe estar lo suficientemente cerca para observar el juego con precisión, aún así debe tomar todas las precauciones para evitar mezclarse en la acción. Cuando se cubre la información sobre protestas y disturbios populares, evite quedar atrapado entre grupos enfrentados o terminar en medio de alguna multitud. “Caminen a los costados de los manifestantes”, recomienda el periodista suizo Dominik Bärlocher del sitio de Internet J-Source perteneciente al Proyecto Canadiense de Periodismo. “La gente que arroja piedras y objetos de esa índole en general lo hace desde el sector medio de la muchedumbre donde pueden mezclarse con la multitud”.
Exhibir las credenciales de prensa o mantenerlas fuera de la vista (pero aún así accesibles para ser exhibidas cuando lo soliciten), es una decisión importante para los reporteros que cubre protestas. En algunas circunstancias, puede ser mejor parecer un civil cualquiera y mantener las credenciales de prensa fuera de la vista, en un bolsillo cerrado y rápidamente accesible, como sugiere Bärlocher en J Source. En cualquiera de los dos casos, los periodistas deben evitar usar ropa como pañuelos coloridos o rompe vientos azules, que podría asemejarlos a manifestantes o a fuerzas de seguridad. En situaciones en que podría ser peligroso que lo confundieran con un manifestante, todos los periodistas deben exhibir sus credenciales de prensa. Para periodistas de radio y televisión, y para otros periodistas que usan equipos para registrar acontecimientos, casi siempre es mejor exhibir una tarjeta de prensa plastificada.
Nunca recoja nada arrojado durante una manifestación. No sólo podría tratarse de un explosivo de fabricación casera o un dispositivito combustible, sino que al hacerlo puede generar sospechas en la policía quien presumirá que usted también es manifestante.
Considere qué cosas llevar cuando cubren una manifestación o un suceso semejante. Bärlocher recomienda una mochila “con una tira al menos cruzándole el pecho y....otra en la cintura”. Para evitar que “golpee contra usted y le impida moverse, especialmente cuando corre”. Todo el contenido de la mochila deberá ser prescindible, entre las cosas a llevar se incluye agua mineral (preferentemente en un bolsillo lateral y abierto), una toalla y un pequeño botiquín de primeros auxilios. Tenga conciencia, sin embargo, de que llevar una mochila, como a menudo hacen los manifestantes, podría conducir a que las fuerzas de seguridad lo confundan con ellos.
Llevar una lima, limón, u otra fruta cítrica puede ser una buena idea, conforme a lo que sugiere la Federación Internacional de Periodistas. La fruta puede exprimirse sobre un área de piel afectada para neutralizar el efecto de irritantes químicos. Una toalla húmeda también puede ayudar a protegerle el rostro de los efectos de agentes externos como gas lacrimógeno o cócteles Molotov. Una máscara antigás, antiparras para nadar, o protección ocular industrial puede también protegerlo contra gases lacrimógenos o gas pimienta. (Eviten usar lentes de contacto si creen que puede llegar a utilizarse gas lacrimógeno o pimienta.) Chalecos livianos para blindaje del cuerpo diseñados para detener puñaladas o balas de goma, junto con gorras recubiertas de metal, pueden resultar recomendables en situaciones particularmente descontroladas. La Federación Internacional de Periodistas recomienda que fotógrafos y camarógrafos lleven cartuchos y tarjetas de memoria falsos para entregar en caso de que les exijan los verdaderos.
Los periodistas deben obedecer las órdenes de las fuerzas de seguridad, aunque las autoridades en ocasiones detienen a periodistas sin antes haber impartido ninguna orden. Por lo menos cuatro periodistas figuraron entre los cientos de detenciones que se produjeron cuando se cubrían las protestas relacionadas con la Convención Republicana de 2008 en St. Paul, Minnesota. Los periodistas fueron arrestados sin previa advertencia cuando la policía intentaba acorralar a manifestantes y periodistas que cubrían sus acciones en un estacionamiento cercado. Días después, la policía arrestó a decenas de periodistas junto a cientos de manifestantes luego de cerrarles el paso a ambos lados de un paso elevado en una autopista.
Mantenga la calma si es arrestado. Si elige contradecir al funcionario que lo arresta, bien podría empeorar la situación. Si va a hablar, haga todos los esfuerzos posibles para mantener una conducta profesional cuando explica que es un reportero y está informando. (No tienen importancia las simpatías que pueda tener por quienes están en escena; lo que realmente importa es que los periodistas no actúen como participantes sino como observadores.) Si las autoridades deciden seguir adelante con la detención, cumpla con las órdenes y espere la oportunidad de presentar su caso con calma ante una autoridad supervisora.

1 comentario:

Dick Torres dijo...

Una recomendación muy importante para los colegas periodistas, en estos tiempos de fuerte agitación en las calles. Saludos. Dick Torres