domingo, 8 de agosto de 2010

Como la AN ve lo que ocurrió con el Banco Federal

En la Asamblea Nacional circula un informe de Coyuntura, realizado por la Red de Conocimiento Legislativo, dependiente de la Dirección de Investigación y Desarrollo Legislativo, en el cual se describe lo que ocurrió con el Banco Federal, intervenido por la Superintendencia de Bancos.

A continuación el texto completo del análisis efectuado en el Parlamento.

AL PELO DE LA QUIIEBRA: BANCO FEDERAL

En el caso del Banco Federal y sus empresas relacionadas se quiso generar una matriz mediática la cual se pretendía focalizar la raíz de la intervención en retaliaciones políticas. No obstante, las evidencias técnicas demuestran que el mencionado grupo financiero no estaba cumpliendo con las
disposiciones de solvencia, liquidez y transparencia, entre otros aspectos, que dispone nuestro ordenamiento jurídico.
En este sentido, el Banco Federal, C.A. se caracterizó por manejar los recursos de sus ahorristas de manera irresponsable y poco adecuada, entre estos manejos se encontraron: Aunado a lo anterior, tres de las instituciones financieras del Grupo Federal fueron objeto de dos planes de ajuste desde el año 1999 hasta el 2007, los cuales no se cumplieron.
Asimismo, la SUDEBAN pudo comprobar que una de estas instituciones, el Banco Hipotecario de Inversión Turística de Venezuela, C.A. (INVERBANCO), en el año 2007, ejecutó el referido plan de ajuste transfiriendo al Banco Federal, C.A. como Fiduciario, la totalidad del patrimonio fideicometido, incluyendo las notas estructuradas.

Medidas de Sudeban

El Banco Federal C.A. al 31 de mayo de 2008 mantenía Bs. F. 5.041 millones en notas estructuradas, de las cuales Bs. F. 3.529 millones se encontraban en el activo y representaban el 405,85% del patrimonio. A partir de octubre de 2009, estas notas fueron desincorporadas y se adquirieron instrumentos de alto riesgo emitidos por empresas domiciliadas en paraísos fiscales denominados en moneda extranjera.
Las acciones llevadas a cabo por el Banco Federal dieron pie para que la SUDEBAN tomara medidas administrativas, y en consecuencia, ordenara la desincorporación y sustitución de las inversiones riesgosas por inversiones rentables, seguras y de fácil realización, que se cotizaran en mercados organizados y cuyos atributos le permitieran brindar la liquidez necesaria para respaldar el dinero del público depositante.

Otorgó préstamos

El Banco Federal, C.A. informó de las acciones para adoptar las instrucciones pero no remitió el Plan Formal de Recuperación requerido una vez impuestas las referidas medidas y, de hecho, las instrucciones emitidas por el ente supervisor no fueron acatadas.
En el año 2010, las inversiones emitidas por empresas domiciliadas en países con baja carga impositiva (paraísos fiscales), fueron sustituidas por acciones de empresas con situación financiera desfavorable, documentada bajo un contrato de fideicomiso cuyo fiduciario es una Institución Financiera extranjera objetada previamente por SUDEBAN.
Igualmente, otorgó préstamos a empresas sin actividad económica que no presentaban evidencias fehacientes de la fuente de repago del crédito, exponiendo los recursos captados del público.

No cumplió instrucciones

Por otro lado, el Banco Federal no cumplió con las instrucciones giradas por la SUDEBAN con ocasión de la Inspección Permanente, relativas principalmente a: 1) aumento de capital social, 2) solventar el déficit del saldo mínimo de encaje legal requerido por Banco Central de Venezuela, 3) incrementar sus activos líquidos y 4) la constitución de las provisiones y ajustes que absorben en un 551% el patrimonio.
El economista Francisco Faraco, reconocido consultor financiero, afirmó que desde 1991 tiene al Federal con una calificación que corresponde a bancos que "poseen debilidades de tal naturaleza e intensidad que sus posibilidades de quiebra son elevadas". Por su parte, Softline Consultores le asignaba al Federal una calificación de D3, peldaño donde se ubican las entidades financieras más frágiles del sistema.

Acciones del Gobierno

La Asociación Bancaria, por su parte respaldó las decisiones de las autoridades oficiales, las que exponemos a continuación:
• El Gobierno Bolivariano y las autoridades financieras del país, aceptaron la recomendación emanada de la Superintendencia sobre la intervención con cese de intermediación financiera de Banco Federal, C.A. según Resolución publicada en la Gaceta Oficial Nº. 5.978 Extraordinario de fecha 14 de junio de 2010.
• Acto seguido, la SUDEBAN, previa opinión favorable del Banco Central de Venezuela, emitió la Resolución Nº 312.10 de fecha 15 de junio de 2010, publicada en la Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela N° 39.447 de fecha 16 de junio de 2010, referida a la “Prohibición de realizar y mantener operaciones con Bancos y otras Entidades, con licencias bancarias y/o de inversión otorgadas en países, estados o jurisdicciones con regímenes impositivos de baja carga fiscal, sin supervisión o regulación monetaria, bancaria o financiera y con intensa protección al secreto bancario”.
• Esta resolución prohíbe únicamente las operaciones realizadas por instituciones financieras venezolanas con Bancos y otras Entidades situadas en paraísos fiscales, las cuales se encuentran reguladas por leyes especiales que les conceden una mayor libertad en sus operaciones, además de un tratamiento fiscal más favorable. Cabe destacar que esta Resolución no tiene incidencia o limitación en las relaciones comerciales con las jurisdicciones que se encuentran en el ámbito de
esta normativa.
Finalmente, se debe destacar que las acciones llevadas a cabo por el Gobierno Nacional son una iniciativa que suma esfuerzos de las Instituciones reguladoras de la materia económica del país, y envía un mensaje positivo a la comunidad financiera internacional donde se refleja la voluntad del Estado venezolano, que ha venido aplicando normas prudenciales a las condiciones de funcionamiento de los mercados financieros, así como reforzar la lucha contra la legitimación de capitales así como proteger los derechos y los ahorros de los ciudadanos.

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